La Unidad Divina: Padre, Hijo Y Espíritu Santo

La revelación divina y teológica nos revela que Dios es un Dios trino, un gobierno y un reino manifestado en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Cada uno de ellos, trabajan unánimes aunque cada uno tiene una diferente función. Aunque la palabra trinidad no aparece en la Biblia, es evidente en las escrituras de que la existencia de los tres es esencial en el cristianismo.

La Trinidad en el Antiguo Testamento

1. En el principio de la creación, vemos que el Padre, Hijo y Espíritu Santo trabajaron para crear al hombre conforme a su semejanza. Genesis 1:26 dice que después de crear la tierra decidieron crear al hombre que gobernara sobre la tierra. Es evidente que Dios creo al hombre para que gobierne sobre la tierra asi como la trinidad gobierna sobre el tiempo y el universo.
2. En Salmo 110:1, el Salmista David confirma la existencia del Padre y la revelación del Hijo cuando dice «Sientate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por el estrado de tus pies» LBLA. Aqui vemos que no solamente el Antiguo y Nuevo Testamento se defienden sino que no existe contradicción.

La Trinidad en el Nuevo Testamento

1. La encarnación del Hijo es el motivo de nuestra salvación y la misericordia del Padre. En 1 Juan 4:9, la Biblia manifiesta que El amor de Dios se manifesto al mundo cuando mando a su Hijo para habitar entre nosotros.
2. Vemos claramente la manifestación de la trinidad cuando Jesús es bautizado por Juan el Bautista. En Lucas 3:22 vemos que el Espíritu Santo vino en forma corporal, como una paloma y la voz del Padre diciendo «Tu eres mi Hijo amado con quien tengo complacencia.» Aqui no solamente vemos confirmación divina de Jesús como la deidad de Dios, sino que vemos la manifestación literal de tres personas trabajando cooperativamente.

Asi como Dios se manifiesta en Padre, Hijo y Espiritu Santo, como iglesia cristiana en Boyle Heights, nosotros nos unimos para someternos a un gobierno supremo y divino. Su trinidad y su autoridad nos maravilla a creer en el y completar nuestras vidas en la tierra.